en el bar frente a dos ventanales luminosos que dan al muelle del vasa tomamos cerveza (sueca) y bocadillos vegetales auténticos. recupero la visión del día después de dos horas oscuras en el vientre de la ballena. agradezco a m. que insistiera en venir, porque prefiero la calle a los museos.
paseamos por el muelle hasta el transbordador. viento, sol y nubes alargadas nos llevan hacia el sur (del centro) de la ciudad. no hay nada más que hacer. dejarse llevar por los lugares que conoce m. o acercarse hasta södermalm.
No hay comentarios:
Publicar un comentario